En cambio, el Alavés regala una camiseta por partido a cada uno de los integrantes de la plantilla vitoriana, que también tienen un descuento sobre el precio final, aunque no especificado. Otros objetivos fundamentales de la normativa son «promover un espíritu de solidaridad entre el fútbol base y el de élite» o «proteger a los menores» poniendo coto a una tendencia de captar jugadores cada vez más jóvenes, detalla la FIFA en el documento.